Agosto, el Mes del Corazón, es una invitación a cuidar el motor que nos mantiene en movimiento. Aunque muchas personas asocian la salud cardiovascular con correr, ir al gimnasio o hacer largas caminatas, la realidad es que podemos fortalecer nuestro corazón incluso desde el escritorio.
El sedentarismo prolongado, típico de las jornadas laborales frente a la computadora, reduce el flujo sanguíneo y aumenta el riesgo de hinchazón, cansancio en las piernas e incluso problemas más serios. Por eso, integrar “pausas activas” cada hora es una de las mejores inversiones para tu salud.
A continuación, te dejamos una lista de los mejores ejercicios para activar la circulación sin salir de la oficina.
Sentado:
- Rotación de tobillos y muñecas: Haz movimientos circulares en ambas direcciones.
- Elevación de talones y puntas: Alterna entre levantar talones y puntas de los pies.
- Estiramiento de piernas: Extiende una pierna hacia adelante unos segundos, luego cambia.
- Flexión y extensión de rodillas: Flexiona y estira las rodillas suavemente.
- Movimientos de cadera: Realiza círculos con la cadera en ambas direcciones.
- Estiramientos de brazos: Estira hacia arriba, a los lados y hacia adelante, moviendo hombros y dedos.
Respiración profunda: Inhala por la nariz y exhala por la boca, lento y controlado.
De pie:
- Caminar: Recorre unos metros por la oficina cada hora.
- Subir escaleras: Elige las escaleras en lugar del ascensor.
- Elevación de piernas: Sube una pierna hacia adelante, atrás y a los lados.
- Estiramientos generales: Dedica tiempo a brazos, piernas, espalda y cuello.
- Caminar de puntillas: Excelente para activar pies y pantorrillas.
Recomendaciones clave:
- Hazlo cada hora: Incluso 3–5 minutos son beneficiosos.
- Hidrátate: El agua ayuda a que la sangre circule con fluidez.
- Consulta profesional: Si tienes problemas de circulación, evalúa el uso de medias de compresión y pide orientación médica.
- Constancia ante todo: Los beneficios se acumulan con la práctica regular.
Un corazón sano no solo se cuida con grandes esfuerzos, sino también con pequeños hábitos repetidos a lo largo del día. Estar en la oficina no te impide ejercitarte, anímate.