Después de las celebraciones de Fiestas Patrias, es normal sentir un pequeño “bajón”. Las largas jornadas de celebración, la comida abundante y el descanso irregular pueden dejarnos con menos energía y dificultar la vuelta a la rutina. Pero no te preocupes: con algunos ajustes simples puedes recuperar tu motivación, enfocarte nuevamente y evitar que el cansancio físico y mental afecte tu bienestar.
Lo primero es volver a darle ritmo a tu cuerpo. Durante las fiestas solemos trasnochar, comer distinto y movernos menos, lo que altera nuestro reloj biológico. Para recuperarte, intenta retomar de manera gradual tus horarios de sueño, adelantando 15 o 20 minutos tu hora de acostarte y levantarte cada día. Hidratarse bien es clave para ayudar a tu organismo a eliminar toxinas. Además, incorporar actividad física suave, como caminatas o yoga, te ayudará a activar el cuerpo sin sobrecargarlo.
Otra recomendación importante es organizar tu espacio y tu agenda. Un entorno desordenado puede aumentar la sensación de estrés y dificultar la concentración. Dedica unos minutos a ordenar tu escritorio o espacio de trabajo y haz una lista de tareas priorizando lo urgente y lo importante, para avanzar sin sentirte abrumado.
Es fundamental también avanzar de menos a más. Intentar ponerse al día en una sola jornada puede ser agotador y contraproducente. Divide tus pendientes en tareas pequeñas y realistas, empezando por las más simples para generar una sensación de logro. Esa motivación inicial te dará el impulso que necesitas para seguir avanzando.
No olvides cuidar tu bienestar emocional. El bajón post fiestas no es solo físico, también puede afectar a tu estado de ánimo. Mantén el contacto social, comparte anécdotas de las celebraciones y busca momentos de autocuidado, como escuchar música, leer algo que disfrutes o simplemente descansar. Estos pequeños gestos pueden marcar una gran diferencia en cómo te sientes.
Por último, es recomendable planear algo que te motive. Parte de la nostalgia que sentimos después de las fiestas se debe a la sensación de que “se acabó lo bueno”. Programar una salida, una actividad nueva o un encuentro con amigos puede ayudarte a mantener el ánimo arriba y a mirar con entusiasmo lo que viene.
Volver a la rutina después del 18 no tiene por qué ser difícil. Con pequeños pasos puedes recuperar tu energía y enfocarte en tus metas, sin perder la alegría de las celebraciones. En Sermecoop nos preocupamos por la salud y el bienestar de las personas, por eso compartimos estos consejos para ayudarte a mantenerte motivado, cuidar tu cuerpo y tu mente, y seguir disfrutando de cada etapa del año.
